lunes, 23 de noviembre de 2009

El valor de las actividades extracurriculares al postular a un MBA

Por: Juan Manuel Salamanca
Fuente: EducAmericas

El paso siguiente a la decisión de estudiar un MBA es sencillo: postular. Si ya decidiste dónde hacerlo y cuál es el formato correcto, debes comenzar a reunir todo el material requerido (desde las cartas de recomendación hasta tus certificados académicos). Pero aquí va un secreto: haber trabajado para la conservación del medioambiente o en una ONG humanitaria puede ayudarte a abrir las puertas de un MBA.

Si antes eran subvaloradas o ignoradas, hoy las actividades extracurriculares se han convertido en una buena fórmula para destacar sobre el resto de candidatos.

"Cursar una maestría tiene un alcance integral que trasciende los conocimientos. El trabajo en equipo, la negociación y el liderazgo pueden ser vividos tanto en una maestría como en el deporte", señala Jorge del Águila, rector de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). "Por ello, tanto las actividades extracurriculares como las inquietudes en otros campos que exceden el profesional y laboral ayudan mucho a complementar el perfil de los postulantes".

Como en todas las organizaciones, las escuelas de negocios también buscan gente con actitud, extrovertida y activa. En el fondo, gente cool. "Ninguna quiere una clase llena de nerds y trabajólicos", asegura Linda Abraham, presidenta de la consultora de admisión Accepted.com.

En todo caso, realizar este tipo de actividades no te garantiza la entrada a la institución. También debes cumplir con todos los demás requisitos. Pero sin duda te ayudarán a sobresalir de la manada, especialmente si son una parte importante en tu vida.

Desde tocar en un grupo de rock o jugar rugby en un equipo local hasta escalar el K2, hay una gran gama de hobbies que pueden destacar cualidades positivas y valoradas por las escuelas como la creatividad, la tenacidad o la audacia.

"Existen muchas actividades que aportan al momento de cursar una maestría: el gusto por la música, tocar algún instrumento, y las actividades físicas, en especial los deportes de equipo", dice Jorge Águila.

Pero no todo suma. Hay algunas labores que los expertos recomiendan no mencionar: las más solitarias y aquellas que requieren de poco esfuerzo, como la lectura, ya que no reflejan habilidades como el trabajo en equipo o el liderazgo, que son aspectos claves para un ejecutivo moderno.

Entre más única sea la actividad que realices, más la puedes aprovechar para destacar entre los otros postulantes.

Es el caso de James Brooman, un estudiante de la Tuck School of Business, que dejó su trabajo en una corporación financiera para viajar en bicicleta desde Alaska hasta la Patagonia. Durante su travesía fue cautivo por una tribu de indígenas de la selva amazónica, su tienda fue atacada por hormigas y casi muere quemado en un incendio en California.

"En viajes como el que realicé, aprendes a mirar desde otros puntos de vista y a apreciar otras perspectivas, lo que ayuda a formar un mejor juicio. Y creo que eso es un gran aporte en mi carrera", dijo Brooman en un reportaje de BusinessWeek.

Por esto, impresionar al comité de admisión puede ser tan simple como contar una buena historia. Si en verdad te apasiona alguna actividad, trata de traspasar esa pasión con un relato o una anécdota. Tampoco hay que caer en exageraciones y mentiras; el comité lo notará.

"Contar con experiencia en actividades de este tipo permite a los alumnos ser más permeables a todo lo que la formación de posgrado implica", afirma Águila.

¿Algo más? No olvides prepararte para enfrentar la entrevista de admisión con una buena historia.

1 comentario:

  1. excelentes tips, que además servirán seguramente no solo para postular a un MBA sino para mejorar la calidad de vida de cada uno, nos aportará una óptica distinta y mejorada...

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